De la mano del organista Rodrigo Brito, de la Catedral de Valparaíso y su ayudante para este proyecto, el estudiante de musicología Alberto Barañao, el órgano que normalmente acompaña la liturgia diaria d ela Catedral recuperó su afinación.
Un proceso que duró casi dos meses, en el que semanalmente se trabajaba con dedicación y tenacidad para lograr el objetivo de recuperar sus mejores notas.
¿Cúando podés escucharlo?, muy fáil, una joya del siglo XVIII totalmente operativa en cada Misa. Te esperamos.