La historia de Chile ha sido forjada por valientes hombres que entregaron su vida por los intereses de la patria. Entre ellos destaca la familia Carrera, cuyos restos mortales descansan en la nave norte de nuestro templo Catedral.

Se trata de las tumbas del Brigadier Juan José Carrera Verdugo, el Coronel Luis Florentino Carrera Verdugo, Doña Francisca Javiera Carrera Verdugo y del General Jose Miguel Carrera, quien fue fusilado un 4 de septiembre de 1821, en la ciudad de Mendoza.

En un nuevo aniversario de su muerte, el Padre Juan Ignacio Schramm, después de celebrar la Santa Misa a las 12:30 horas, se dirigió junto con toda la asamblea a la tumba de los hermanos Carrera.

Allí se realizó un responso por el descanso eterno del General José Miguel Carrera, prócer de la patria, que junto a sus hermanos, desempeñó un papel crucial durante el periodo de la Independencia. Carrera llegó a ser la máxima autoridad del país y del Ejército que enfrentó a los realistas entre 1812 y 1813.

Este período, conocido como la Patria Vieja, vio el nacimiento de los primeros símbolos patrios: la escarapela, la bandera y el escudo nacional.

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«Yo soy la resurrección y la vida; quien cree en Mí, aunque haya muerto vivirá; y todos los que en Mí crean, no morirán eternamente»